Sabotaje Divino

Vamos a estar claros ya lo que ocurre en Venezuela no puede ser obra de la casualidad. Como una consecuencia de la proximidad de las elecciones presidenciales, nuestro país esta sufriendo de forma inclemente un sabotaje divino, Así como lo oyen, en un principio se pensó que se trataba del imperio norteamericano, luego se pensó en grupos ultraderechistas de procedencia internacional eran los responsables. Pero ya estamos claros que realmente lo que ocurre es un plan de la divinidad para perjudicar al Comandante Presidente y sus intenciones reeleccionistas.

            Las pruebas abundan, ¿como es posible que existiendo tan pocas líneas ferroviarias en el país, se produzca un choque de trenes? La oposición puede decir que hay falta de mantenimiento, de planificación de pericia para manejar los trenes, pero en definitiva todos debemos asumir que solo la influencia divina pudo causar un accidente como ese.

            Otro ejemplo claro del sabotaje son los constantes apagones que ocurren en la geografía venezolana. Primero pensamos que eran causados por la sequía, pero ahora esta lloviendo copiosamente y los mismos continúan, después pensamos que era un ejercito de iguanas comecables pero tampoco, nos hemos dado cuenta que debe haber algún santo subiendo y bajando el interruptor maestro de luz y eso es lo que esta produciendo la ausencia constante de energía en el país.

            La semana pasada la crisis se traslado al transporte aéreo, de la noche a la mañana comenzaron a no abrir trenes de aterrizaje, a desprenderse ruedas de aviones, a acabarse el café y el juguito en las unidades, en fin todos los elementos que de alguna manera pueden desencadenar no solo una tragedia aérea sino una mala experiencia del pasajero.    No esto no es casualidad, esto es un proceso continuo destinado a perjudicar la opción victoriosa de la revolución bonita, si a esto le sumamos la inseguridad personal, el desastre en las vías de comunicación terrestre, los pésimos indicadores económicos y el desempleo campante no podemos mas que acudir ante la representación diplomática del Vaticano para reclamar de manera contundente esta injerencia directa de Dios en el proceso electoral venezolano.

            Ya basta Venezuela es soberana, Venezuela se respeta y estamos hartos de esta serie de eventos que buscan malponer al gobierno rojo y beneficiar a los bate quebraos opositores también conocidos como los majunches. No nos extrañaría que el plan desestabilizador se incrementara, ya hemos visto como hay manifestaciones de damnificados, desempleados, excluidos, pobres extremos y otra serie de ciudadanos que al rezar y no ver cumplidas sus peticiones con seguridad van a venir reclamarnos cuando debemos estar claros que la solución de sus males está en manos del poder supremo de Dios. Seguiremos adelante de forma vigilante, hasta la victoria siempre, patria, socialismo y muchísima vida… Si Dios quiere!!

La imagen que ilustra el post es cortesia de 15cajas.blogspot.com