En estos momentos la mayoría de los seguidores de La Vinotinto piden la cabeza de Cesar Farias como director técnico fundamentados en las derrotas recibidas en partidos amistosos fundamentalmente, siendo la gota que rebaso el vaso la “inesperada” derrota ante la selección argentina en suelo gaucho la semana pasada. Múltiples pancartas se hicieron presentes en diversos escenarios futbolísticos el pasado fin de semana pidiendo el cese de la gestión del técnico sucrense y a eso debemos sumarle que ya diversos medios de comunicación se han hecho eco de estas propuestas y se han sumado a las voces que claman por una nueva dirección técnica para nuestra selección.
Farias ciertamente merece hasta cierto punto tener buena parte de los detractores que tiene, fundamentalmente por su apariencia soberbia y petulante es lo que en criollo llamamos un “engreído” y eso por supuesto genera rechazo inmediato aun cuando su actitud no sea muy diferente a la de muchos venezolanos que sin ser director técnico de la selección de futbol también tienen actitud de divas o ¿nos vamos a caer a embustes?.
Por otro lado, esa misma actitud soberbia hace que Cesar Farias sea poco receptivo con las críticas o no recuerdan su ya famosa frase de la “carita pelada”. ¿Pero así no somos casi todos? O es que vamos a negar que en buena medida nos ponemos a la defensiva cuando recibimos críticas en nuestros trabajos. Entiendo que no es lo mismo ser contador de un ministerio que el técnico de la selección nacional de futbol, lo que quiero decir con estas comparaciones es que Farias es mas venezolano que la arepa y que su actitud nos guste o no son exactamente iguales a las que tenemos cada uno de nosotros en nuestras funciones laborales.
En relación al funcionamiento de la selección desde el punto de vista futbolístico es cierto que no estamos listos para ganar un mundial y probablemente todavía bajo el mando de Farias no estemos listos para obtener un cupo para siquiera ir a jugarlo. Pero es aquí donde debemos retomar las perspectivas, Venezuela viene avanzando, viene progresando pero no recuerdo en que momento pasamos a ser la potencia suramericana que debía ir a golear a la Albiceleste en su patio.
Si algo le reconozco a Farias es su irreverencia quizás producto de ese exceso de confianza o de ego que lo hace ir a jugar amistosos con quien sea y donde sea sin temor. Eso se aprecia porque sin duda esas derrotas ante grandes generan conocimiento y crecimiento. Prefiero perder mil veces ante Argentina en suelo gaucho que ganarle a la selección de Cuba en Puerto la Cruz.
Además le reconozco que se ha dado a la tarea de darle oportunidad a los más jóvenes y a jugadores desconocidos para nosotros en aras de ir formando el grupo para que jueguen los reales compromisos que tenemos en el futuro entiéndase la Copa America y las Eliminatorias para Brasil 2014, para eso creo que son los amistosos. Para probar, jugar y conocer, perder o ganar tiene un sentido secundario.
Yo creo que Farias debe seguir, por supuesto que tiene muchas cosas que mejorar como técnico y como persona pero entiendo que la verdadera evaluación de su proceso se hará en la Copa America y no en los amistosos. Además en caso de que la actuación de Venezuela no llene las expectativas generadas por la actuación de esta nueva camada de estrellas internacionales como lo son Salomon, Miku, Rosales, Vargas entre otros pues allí debería terminar el ciclo y darle la posibilidad a otro técnico que nos lleve a las eliminatorias del mundial. Por lo pronto Yo quiero que Farias siga, a pesar de su “carita pelada” y de su divismo insoportable total yo no lo quiero para que sea mi mejor amigo sino para dirigir a La Vinotinto!
La Foto de Farias fue tomada de gravesinhas.wordpress.com muchas gracias!
Panchito en esta tenemos opiniones diferentes
ResponderBorrarGracias mi pana por el comentario. otra vez sera!!
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